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Lugares turísticos de España, Francia, Italia, etc...Cosas que ver en Irlanda
Artículo sobre Irlanda, enviado por David Rubio y publicado el 06/05/2012La República de Irlanda es un destino muy indicado para amantes de la naturaleza. Varios de los parajes más bellos de las Islas Británicas se encuentran en este país caracterizado por sus costas escarpadas, acantilados y lagos. Eire cuenta con un sinfín de lugares de interés turístico vinculados al disfrute de la naturaleza, pero también monumentos y testimonios de una historia apasionante.
Eire se extiende a lo largo de gran parte la isla de Irlanda. En el noreste se encuentra Irlanda del Norte, perteneciente a la Corona Británica, mientras que Eire es un país independiente desde 1921. Es la tercera isla más grande de Europa por detrás de Gran Bretaña e Islandia. La costa oeste es más accidentada que la oriental y sus acantilados son de gran impacto visual. El punto más alto el Carrahuntoohill con poco más de 1.100 metros. El interior de la isla es una sucesión de pequeñas ondulaciones que crean un ambiente dinámico donde la naturaleza brilla en todo su esplendor.
Irlanda vivió el asentamiento de los celtas en torno al siglo XVII a.C. Las invasiones de los vikingos primero y los anglonormandos después, ambas durante la Edad Media, marcaron la historia de la isla. Irlanda perteneció desde principios del XIX al Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda hasta que en 1921 y tras sangrientas luchas llegó la independencia de la República de Irlanda.
Para el viajero interesado en los testimonios históricos más antiguos, una parada obligada es el área arqueológica de Brú na Bóinne / Newgrange, a unos 50 km al norte de Dublín. Se trata de un lugar catalogado por la UNESCO como Patrimonio Histórico de la Humanidad. Y es que acoge una necrópolis con más de 5.000 años de antigüedad. Entre las tumbas, destaca la que se encuentra en Newgrange, uno de los monumentos prehistóricos más importantes de Europa.
Esta área arqueológica se halla en el precioso Valle de Boyne, que cuenta con numerosos monasterios y castillos medievales en el incomparable ambiente de verdes praderas irlandesas.
Pocos kilómetros más al norte se encuentra el Monasterboice, famoso por acoger la Muiredach’s Cross, testimonio señero de las ‘cruces celtas’ medievales. A unos 50 km al sur de Dublín tenemos también el Glendalough, un monasterio del siglo VI, otro testimonio de gran interés histórico artístico.
Si nos vamos hacia las tierras del interior en dirección oeste nos encontraremos con Cashel, donde podremos contemplar las ruina de una fantástica fortaleza medieval además de acercarnos a la Cormac’s Chapel, magnífico ejemplo del Románico irlandés.
Los apasionados de la naturaleza no deben perderse el Killarney National Park en el suroeste de la isla. Y por supuesto, acercarse a los Skellig Rocks, islotes en el extremo suroeste de Irlanda, con un gran atractivo visual. En uno de los islotes se encuentra además un asentamiento monástico de los primitivos cristianos protegido por la UNESCO.
Si avanzamos por la escarpada costa oeste podremos maravillarnos con los espectaculares acantilados que se abren al mar. En el condado de Clare, además, no debemos dejar escapar la oportunidad de ver The Burren, una zona plagada de cuevas y ríos subterráneos donde se producen numerosos fenómenos cársticos.
Y ya que estamos en la costa oeste, una parada en Galway, es de lo más agradecido. Esta ciudad muestra el lado más tradicional de Irlanda. Un precioso paraje urbano donde escuchar a los oriundos comunicarse en gaélico.
Temas: acantilados cuevas naturaleza monumentos